FEMINICIDIO
RECONOCIENDO LAS VIOLENCIAS QUE LO CONFORMAN
Mónica Maydez
Editorial Ariadna
Colección de Ensayo:
Teseo Enredado / 8
México, 2022, 140 páginas
ISBN: 978-607-8269-66-2
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monica.maydez@gmail.com
Con respeto, in memoriam, a todas las víctimas
de este atroz delito y a todas las mujeres que leen este libro,
¡que nunca se conviertan en una cifra más!
ANTES DE ENTRAR EN MATERIA…
En las últimas décadas los homicidios violentos contra las mujeres han proliferado y eso ha dado como resultado un aumento en todos los tipos de violencia hacia la mujer, además de una falta de empatía social que ha llevado a la impunidad de dichos actos dolosos.
La violencia contra la mujer ha existido desde el principio de la humanidad. En nuestro país aumentó durante la imposición de la religión católica y sus normas sobre “ser una buena esposa”; es decir, con la sumisión de la mujer ante el hombre. Esto comprende todo un movimiento moral que predica que el hombre es la cabeza de la mujer, así como Cristo lo es del hombre. Es decir, en dicha jerarquía, nosotras quedamos hasta abajo, al servicio del marido y de Cristo.
Esto, por supuesto, ha traído bastantes interpretaciones desfavorables. Dicha ideología religiosa se llevó al ámbito social, laboral, escolar. En todos lados se presumía la superioridad del hombre sobre la mujer, lo que implicaba una obediencia necesaria. Después ya no fue solo al padre, también se nos obligó a someternos al marido, al patrón, al sacerdote, al tío, al que fuera siempre y cuando se tratase de un hombre.
Ésta es una manera de comprender el porqué se nos ha violentado a lo largo del tiempo. Hemos sido minimizadas y vistas como las débiles, las que necesitamos protección, las que requerimos provisión, y además, las que somos aptas para permanecer en el hogar, dedicarnos a la crianza de los hijos y a hacernos cargo de las tareas del hogar.
Mientras que nuestro lugar ha sido el privado, es decir, el hogar y todo lo concerniente a él; a los hombres se les ha asignado el lugar público, como las empresas, los comercios, las universidades. Por alguna falsa ideología se les ha eximido del cuidado de los hijos y de las tareas del hogar; cuando ellos ocupan el mismo espacio.
El poder patriarcal sustenta el control del cuerpo de la mujer. Por lo tanto se cree que la mujer le pertenece al hombre: primero como hija y después como esposa. Se ha llegado a considerar que la mujer tiene la obligación de estar a disposición sexual de su novio/marido, atenta a sus necesidades, de buen humor y complaciente con él porque ése es su papel. Además se ha creado la ideología de que nosotras debemos impulsar y apoyar a nuestros hombres para que terminen una carrera profesional, para que obtengan un ascenso, para que reposen cuando lleguen del trabajo, entre otros. Por si esto fuera poco, se ha considerado que la mujer no trabaja por no salir del hogar. Vivimos con la idea de que si a él le va bien, nosotras estaremos mejor económicamente.
Todo este escenario patriarcal ha favorecido la violencia hacia nosotras. Nos ha convertido en objetos de cosificación sexual y, no obstante, nos ha colocado en el papel de paridoras, cuidadoras y maestras de familia y/o de los hombres.
Es un contexto amplio el que nos ha posicionado como víctimas del sistema patriarcal; sin embargo, las denuncias contra toda esta violencia comenzaron a visibilizarse en el siglo XX. El caso que más ha llamado la atención de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, fue el de los asesinatos dolosos de mujeres en Chihuahua en 1993. Fueron crímenes con un alto grado de violencia y crueldad. Por ello, se introdujo el término “feminicidio” en nuestra legislación penal.
La activista feminista mexicana Marcela Lagarde decidió utilizar el vocablo «feminicidio», en lugar de traducirlo literalmente al español como «femicidio»,(1) para añadir un elemento de impunidad, de violencia institucional y falta de diligencia en América Latina respecto a las mujeres. (2)
En nuestro país existe una clara discriminación hacia nosotras por el simple hecho de ser mujeres. Esta discriminación ha dado como resultado toda la violencia de la que somos objeto. Comenzando por la violencia doméstica, que se desarrolla donde, teóricamente, la mujer debería ser protegida y sentirse segura. La violencia institucional, la violencia laboral, la deportiva, la religiosa y la urbana son otros factores peligrosos. En todos los lugares existe violencia contra la mujer, incluso en los hospitales.
Por ello, en este ensayo, me he propuesto hacer un recorrido sobre las violencias desde sus inicios, con todo el catálogo que les compete, hasta los feminicidios y tratados internacionales en los que México participa.
Aunado a lo ya mencionado, nos encontramos con que nuestro sistema legal penal es sexista, patriarcal y, nuevamente, discriminatorio con nosotras. Sin embargo, esto no ha impedido que sigamos avanzando y exigiendo justicia por los crímenes ejercidos contra nosotras.
#NiUnaMás
ÍNDICE
9 ANTES DE ENTRAR EN MATERIA…
13 I. Violencia masculina (o de género). “Por mis pistolas”
14 a) ¿Qué es la violencia?
15 b) La discriminación, base de toda violencia
21 II. Tipos de violencia ejercidos contra la mujer
21 a) Amor romántico. ¡Eres mi media naranja!
27 b) Violencia física. “Te pego porque te amo”
30 c) Violencia sexual. “Eres mi mujer”
39 d) Violencia psicológica. ¡Estás loca!
48 e) Violencia emocional. ¡Si me dejas, me mato!
50 f) Violencia digital. ¡Protégete si vas a hacer sexting!
55 g) El mito de la feminidad. Mujer = Coqueta
60 h) Violencia económica. ¡Yo te mantengo!
62 i) Violencia patrimonial
64 j) Violencia gineco-obstetra
67 III. ¿Qué es un feminicidio? Gargajos en las flores
69 IV. Violencia feminicida
73 a) Rasgos del feminicida
78 b) Feminicidios infantiles
84 c) Feminicidios familiares e íntimos
90 d) Feminicidios indirectos
92 e) Feminicidios por orientación sexual
97 f) Feminicidio no íntimo / por prostitución
103 g) Feminicidio por crimen organizado
107 V. Víctimas colaterales del feminicidio
111 VI. México feminicida
117 VII. La justicia penal mexicana y su clara inclinación misógina
119 a) En cuanto a los servidores públicos
121 b) Sobre los delitos sexuales que revictimizan a la víctima
126 c) Después de la lluvia, sale el sol
128 A manera de conclusión
131 Mónica Maydez. Semblanza
133 Fuentes consultadas
SEMBLANZA
MÓNICA MAYDEZ